Respuesta al comentario de la excusada, en su acepción de disculpada; pues no hay peor ciego que el que no quiere ver
Hace unos días respondíamos a un comentario para reafirmarnos en lo dicho: Nosotros, tanto los familiares como los trabajadores de la Residencia Asistida de Cáceres, sabemos que el personal sanitario del centro está haciendo un trabajo excepcional (https://bit.ly/3f2hhEl).
La misma persona a la que contestamos ha debido coger gusto a escribir comentarios en esta weblog para volver a decir lo mismo a lo que ya fue contestada. Es por ello que esta nueva réplica hemos decidido titularla de la siguiente manera: Respuesta al comentario de la excusada, en su acepción de disculpada; pues no hay peor ciego que el que no quiere ver.
Y es que cuando uno se empecina en no ver le suele ocurrir como a los prisioneros de la famosa alegoría de la caverna (también conocida por el nombre de mito de la caverna) del filósofo griego Platón.
En esta ocasión nuestra excusada de las fake news, amparada en esa mitomanía que la caracteriza y que consiste en falsear la realidad como vía de escape para obtener aprobación o admiración, y por eso la disculpamos a la pobre, nos dice algunas cosas que desvelan su statu quo, o dicho con una locución de ese destacado representante de la sociología contemporánea que es Pierre Bourdieu, alguien que se destapa como agente en posición dominante y que trata de imponer sus producciones culturales y simbólicas en el desempeño de su papel esencial en la reproducción, en su espacio de biopoder (que diría el filósofo, también francés, Michel Foucault), de unas relaciones sociales de dominación.
En lógica, a este burdo método de engaño que utiliza nuestra excusada de las fake news, se lo denomina la falacia de la verdad a medias. Las verdades a medias son frases engañosas y falsas que producen un engaño provocado por omisión.
Dice nuestra excusada de las fake news que como trabadora del centro "sólo puede agradecer" que "se las haya puesto a los pies de los caballos, que se esté cuestionado su profesionalidad y que incluso, se los esté tachando de negligentes y de 'estar contratados a dedo' como escupen las RRSS".
Nosotros esas cosas no las agradecemos, más bien las denunciamos; y si ella es consciente de ello ya está tardando en poner denuncia. Pues como decíamos ayer mismo (https://bit.ly/2VLJDeG), es obligación de todo ciudadano denunciar lo que es presunto delito (falta, infracción, quebrantamiento, transgresión, vulneración, ofensa, ...), así como los hechos de los que se tengan conocimiento y que pudieran presumirse como delictivos, así lo establece el artículo 259 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
Es más, le recomendamos a nuestra excusada de las fake news que haga como nosotros hacemos, líbrese de esas redes sociales en las que en vez de razonar y exponer civilizadamente argumentos, escupen; pues ya dice el refrán, dime con quién andas y te diré quién eres.
Además nuestra excusada de las fake news falta a la verdad, pues siempre los familiares han apoyado las manifestaciones, así como las demandas de personal y medios materiales para proporcionar una asistencia sociosanitaria de calidad a los residentes. Es más, cuando algunos sindicatos estaban en stand by (en espera) hemos sido los familiares de los residentes los que hemos instado a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social a que cursara requerimiento, como así procedió a hacer la ITSS "de conformidad con lo que dispone el artículo 45 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales a efectos de que proceda de manera inmediata a dar cumplimiento a la totalidad de la normativa existente en relación con el virus mencionado y la posible exposición de los trabajadores del centro al mismo.". (https://bit.ly/2W3AfBO)
Por nuestra parte, como familiares de residentes (y fallecidos por COVID-19) de la Residencia Asistida El Cuartillo de Cáceres, decimos que ojalá la Fiscalía pueda continuar con normalidad con su trabajo de tomar declaración a todos los trabajadores del centro. "Por el momento, tal y como ha informado la Fiscalía, no están previstas más declaraciones ante la imposibilidad de identificar y citar a todos los empleados de la residencia. Para ello ha pedido a la policía que les facilite una relación de nombres y apellidos de todos los empleados del centro." (https://bit.ly/2SiK1z6).
El personal sanitario no tiene nada que temer del Ministerio Fiscal, pues de lo que se trata aquí no es una cuestión de atención sanitaria; es una cuestión de nefasta (en su acepción de aciaga y fatídica) gestión de la dirección, del SEPAD y de la propia Junta de Extremadura por la tardanza en ofrecer medios y de equipos de protección (EPIs) a los trabajadores: "Los trabajadores no recibían mascarillas. «Se guardaban bajo llaves y no se repartía para no alarmar»" (https://bit.ly/2S4jJRa); así como de aislamiento y distanciamiento social adecuado de los residentes durante mucho tiempo. Y eso no se puede negar. Pues fotografías y hasta vídeos existen de ello como los medios de comunicación conocen (https://bit.ly/2VFhVQy).
Ni creo que al Ministerio Fiscal lo anime, dado el desempeño, rigurosidad y diligencia que muestra en el desarrollo de su trabajo investigador, "ningún sentimiento vil y dañino que busque venganza por rencillas y odios de antaño, revanchas por temas políticos, ..." como nuestra excusada de las fake news dice. Pues es la Fiscalía de Cáceres la que ha iniciado el proceso de toma declaraciones a empleados de la Residencia Asistida El Cuartillo de Cáceres. Tampoco creo que nadie esté "viendo" en este asunto "la oportunidad de cortar cabezas, sin miramientos a atropellar la imagen y la dedicación de todos los profesionales que durante años han estado dando el 300% de sí mismos por los miles de residentes que han pasado por la Asistida de Cáceres". Pues le insistimos a nuestra excusada de las fake news: Nosotros, tanto los familiares como los trabajadores de la Residencia Asistida de Cáceres, sabemos que el personal sanitario del centro está haciendo un trabajo excepcional (https://bit.ly/3f2hhEl). A ver si lo que le va a suceder a nuestra excusada de las fake news es lo que afirmaba el teólogo y humanista francés Juan Calvino, "La tortura de una mala conciencia es el infierno de un alma viviente".
La misma persona a la que contestamos ha debido coger gusto a escribir comentarios en esta weblog para volver a decir lo mismo a lo que ya fue contestada. Es por ello que esta nueva réplica hemos decidido titularla de la siguiente manera: Respuesta al comentario de la excusada, en su acepción de disculpada; pues no hay peor ciego que el que no quiere ver.
Y es que cuando uno se empecina en no ver le suele ocurrir como a los prisioneros de la famosa alegoría de la caverna (también conocida por el nombre de mito de la caverna) del filósofo griego Platón.
En esta ocasión nuestra excusada de las fake news, amparada en esa mitomanía que la caracteriza y que consiste en falsear la realidad como vía de escape para obtener aprobación o admiración, y por eso la disculpamos a la pobre, nos dice algunas cosas que desvelan su statu quo, o dicho con una locución de ese destacado representante de la sociología contemporánea que es Pierre Bourdieu, alguien que se destapa como agente en posición dominante y que trata de imponer sus producciones culturales y simbólicas en el desempeño de su papel esencial en la reproducción, en su espacio de biopoder (que diría el filósofo, también francés, Michel Foucault), de unas relaciones sociales de dominación.
En lógica, a este burdo método de engaño que utiliza nuestra excusada de las fake news, se lo denomina la falacia de la verdad a medias. Las verdades a medias son frases engañosas y falsas que producen un engaño provocado por omisión.
Dice nuestra excusada de las fake news que como trabadora del centro "sólo puede agradecer" que "se las haya puesto a los pies de los caballos, que se esté cuestionado su profesionalidad y que incluso, se los esté tachando de negligentes y de 'estar contratados a dedo' como escupen las RRSS".
Nosotros esas cosas no las agradecemos, más bien las denunciamos; y si ella es consciente de ello ya está tardando en poner denuncia. Pues como decíamos ayer mismo (https://bit.ly/2VLJDeG), es obligación de todo ciudadano denunciar lo que es presunto delito (falta, infracción, quebrantamiento, transgresión, vulneración, ofensa, ...), así como los hechos de los que se tengan conocimiento y que pudieran presumirse como delictivos, así lo establece el artículo 259 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
Es más, le recomendamos a nuestra excusada de las fake news que haga como nosotros hacemos, líbrese de esas redes sociales en las que en vez de razonar y exponer civilizadamente argumentos, escupen; pues ya dice el refrán, dime con quién andas y te diré quién eres.
Además nuestra excusada de las fake news falta a la verdad, pues siempre los familiares han apoyado las manifestaciones, así como las demandas de personal y medios materiales para proporcionar una asistencia sociosanitaria de calidad a los residentes. Es más, cuando algunos sindicatos estaban en stand by (en espera) hemos sido los familiares de los residentes los que hemos instado a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social a que cursara requerimiento, como así procedió a hacer la ITSS "de conformidad con lo que dispone el artículo 45 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales a efectos de que proceda de manera inmediata a dar cumplimiento a la totalidad de la normativa existente en relación con el virus mencionado y la posible exposición de los trabajadores del centro al mismo.". (https://bit.ly/2W3AfBO)
Por nuestra parte, como familiares de residentes (y fallecidos por COVID-19) de la Residencia Asistida El Cuartillo de Cáceres, decimos que ojalá la Fiscalía pueda continuar con normalidad con su trabajo de tomar declaración a todos los trabajadores del centro. "Por el momento, tal y como ha informado la Fiscalía, no están previstas más declaraciones ante la imposibilidad de identificar y citar a todos los empleados de la residencia. Para ello ha pedido a la policía que les facilite una relación de nombres y apellidos de todos los empleados del centro." (https://bit.ly/2SiK1z6).
El personal sanitario no tiene nada que temer del Ministerio Fiscal, pues de lo que se trata aquí no es una cuestión de atención sanitaria; es una cuestión de nefasta (en su acepción de aciaga y fatídica) gestión de la dirección, del SEPAD y de la propia Junta de Extremadura por la tardanza en ofrecer medios y de equipos de protección (EPIs) a los trabajadores: "Los trabajadores no recibían mascarillas. «Se guardaban bajo llaves y no se repartía para no alarmar»" (https://bit.ly/2S4jJRa); así como de aislamiento y distanciamiento social adecuado de los residentes durante mucho tiempo. Y eso no se puede negar. Pues fotografías y hasta vídeos existen de ello como los medios de comunicación conocen (https://bit.ly/2VFhVQy).
Ni creo que al Ministerio Fiscal lo anime, dado el desempeño, rigurosidad y diligencia que muestra en el desarrollo de su trabajo investigador, "ningún sentimiento vil y dañino que busque venganza por rencillas y odios de antaño, revanchas por temas políticos, ..." como nuestra excusada de las fake news dice. Pues es la Fiscalía de Cáceres la que ha iniciado el proceso de toma declaraciones a empleados de la Residencia Asistida El Cuartillo de Cáceres. Tampoco creo que nadie esté "viendo" en este asunto "la oportunidad de cortar cabezas, sin miramientos a atropellar la imagen y la dedicación de todos los profesionales que durante años han estado dando el 300% de sí mismos por los miles de residentes que han pasado por la Asistida de Cáceres". Pues le insistimos a nuestra excusada de las fake news: Nosotros, tanto los familiares como los trabajadores de la Residencia Asistida de Cáceres, sabemos que el personal sanitario del centro está haciendo un trabajo excepcional (https://bit.ly/3f2hhEl). A ver si lo que le va a suceder a nuestra excusada de las fake news es lo que afirmaba el teólogo y humanista francés Juan Calvino, "La tortura de una mala conciencia es el infierno de un alma viviente".